El Cinquillo
Cuando los niños empiezan a conocer
los números, el Cinquillo es un juego ideal porque les enseña a contar no sólo
numeralmente, sino ordinalmente; es decir, a entender el lugar que ocupa cada
número hacia adelante y hacia atrás.
En este juego se reparten las cartas
entre los jugadores. Comienza el que tenga el cinco de oros y lo pone
sobre la mesa. Los demás jugadores pueden colocar la carta que sigue o
precede al cinco de oros, un cinco de otro palo, la carta que sigue o preceden
a éste, robar del mazo –si lo hay- o pasar el turno si no pueden tirar. Nunca
se puede pasar si se puede colocar una carta en la mesa. Gana la ronda el
primer jugador que se descarte, obteniendo cinco puntos y un punto más por cada
carta que no han tirado sus contrincantes.
El juego del
burro. En este debemos repartir 4
cartas de la baraja entre todos los de la familia que participen en el juego.
Deberá cada jugador intentar tener 4 cartas del mismo del mismo número, como al
principio será muy difícil tenerlas, seguramente tengan que ir cogiendo una
carta extra cada vez que sea su turno. Al principio del juego habremos quitado
todas las cartas con letras de la baraja, para repartir solamente las que
tengan número. Cada vez que un jugador tenga 4 cartas del mismo
número irá quedándose fin hasta
que se termine la baraja, y cada vez que consiga cuatro cartas del mismo número
el jugador en cuestión gritará: ¡burro! Ganará
el que más cartas del mismo número logre encontrar, por lo que deberemos contar
las cartas de todos los jugadores al final.
El juego del mentiroso. Para jugar al
mentiroso necesitaremos una baraja española. Mezclaremos bien todas las cartas,
sacando las letras para quedarnos solo con los números, y repartiremos siete cartas para cada jugador. Las que han sobrado las dejaremos a un lado porque las
volveremos a necesitar. Al primero que le toque tendrá que poner una carta boca
abajo en el centro de la mesa y decir el número uno, como se llama el mentiroso
puede que realmente sea un uno como que no.
En
dirección a las agujas del reloj iremos colocando las cartas boca abajo encima
de la mesa hasta llegar hasta el doce. Para jugar a este juego debes conocer muy bien al miembro de la familia,
porque debes detectar si está mintiendo o si el número que ha puesto encima de
la mesa es realmente el correcto. Cuando se terminen todas las cartas
repartidas podemos dar unas siete más del montón y ganará aquel que se quede
sin cartas, puesto que si pillan al mentiroso tendrá que
quedarse con todas las del centro de la mesa y le será
mucho más difícil deshacerse de todas ellas para poder ganar
Juego de memoria (Memory Matchin El Memory es un juego
de cartas fácil que puedes jugar con infantes y con chicos de preescolar que
están aprendiendo sobre emparejamiento. Usa solo la mitad del mazo de cartas
para comenzar. Pon las cartas boca arriba en filas parejas de manera de que
todos los niños las vean, y luego da vuelta todas las cartas. Enséñale a los
niños cómo buscar parejas, dando vuelta una carta y luego otra. Si no es un
par, vuelve a poner las cartas boca abajo y pasa el turno al siguiente jugador.
Si el jugador encuentra una pareja, se lleva las dos cartas y toma un turno
adicional. Recuérdale a los jugadores que presten atención cuando las cartas se
dan vuelta para que recuerdan dónde están los pares. A medida que los chicos
van aprendiendo y mejorando, pasa a incluir el mazo entero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario